Testimonio de algunas participantes al Capítulo General
“ Enviadas al mundo con Jesús Servidor y Salvador, nuestra alianza debe abrirse a todos los horizontes y periferias que el Espíritu nos susurre, respetando los ritmos posibles, integrando las diferencias, con audacia, determinación y paciencia histórica” ( Margarita Saldaña)
Viví el vigésimo capitulo; fue para mí, oportunidad de contemplar con honestidad la vida de la Congregación. Tiempo de nombrar heridas hechas a la justicia, al cuidado, la hospitalidad y en la fraternidad /sororidad; son heridas y cicatrices en la sociedad de la cual somos parte, y en nosotras como institución…
También fue tiempo de sentir, reconocer y agradecer los frutos y los cuidados del amor que nuestro Carisma aporta al mundo… Fue tiempo de ENCUENTRO con nuestra diversidad, confirmando nuestra opción por la interculturalidad, abriéndose a la “danza difícil de ir acompasándonos unas con otras”, para que la fecundidad de nuestra alianza se sostenga mutuamente.
Con ternura e Axé, Hildete (Hermanita Brasilera en Perù)
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Un Capítulo es un acto colectivo de amor, de fe y de esperanza.
Es un tiempo para amar la Tierra, el mundo, el Universo entero que Esteban Pernet nos ofrecía abierto. Es un tiempo de tirar muros y barreras… para escuchar, contemplar, y abrazar la realidad propia, la de la otra, la de países y ciudades a los que probablemente nunca viajaremos pero que forman parte de la geografía de nuestra piel congregacional.
Es un tiempo para creer, aun cuando las gráficas, las demográficas, las diferencias o los intentos fracasados nos tientan con sus lazos de prudencia o de pavor… es entonces, en medio de esa noche y ese vacío… que una Promesa se abre camino: de esta empresa, nos somos propietarias, sólo accionistas en la medida en que cada una, y juntas, nos disponemos a invertir lo que somos… con mucha fe. Sabiendo que es Otro el que ya se jugó el pellejo en esta aventura. El sostiene.
Y es, finalmente, un tiempo de espera y de esperanza. Un tiempo de regar los sueños y de reparar las alas, porque el horizonte no es otro que el Reino de Dios, en medio de los pobres, los pequeños, los obreros y sus familias.Vamos cargadas de semillas… que el Señor nos de buena tierra y buena lluvia.
El Capítulo comienza ahora.
María José Vallejo, HA -Madrid-España
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«Compañera de esperanza en tiempo de fragilidad»
Este tema nos ha acompañado todo este año de preparación al capítulo y nos ha permitido crecer durante este capitulo, lleno de profundidad y riqueza. Desde el libro de Ruth hemos ahondando cada vez más en nuestros raíces en la vivencia de estas mujeres héroes.
Soy Marie Claire Muhika, tengo 5 años de votos perpetuos, soy Congolesa, estoy en misión en Perú, es mi primera participacion al capítulo général; para mi ha sido un tiempo fuerte de cuerpo Congregacional, de búsqueda juntas de la voluntad de Dios; tiempo de confianza y de comunión con cada hermanita.
He experimentado la libertad de expresión y el respeto en la participación de cada una; la sintonía en las ideas me dejaba contemplar la presencia de Dios y del Espíritu Santo. Valoro cada paso que hemos dado. Mí agradecimiento a cada hermanita por su oración y participación.
Marie Claire Muhika.HA